Todo sigue igual

Esta entrada iba a llamarse "Vuelta a la normalidad", pero en verdad este año no he tenido vacaciones, apenas una semanita en la que ejercí de tita de mis sobrinas por la llegada de su nueva hermana. Así que mi verano ha estado lleno de madrugones de lunes a viernes y apenas he pisado tres días mi tan amada playa.

Pero no me quejo de ni uno solo de estos días y es que después de haber estado un año de "vacaciones" estar otro año trabajando no se ve con tan malos ojos. Sobre todo teniendo en cuenta que estoy muy contenta en mi trabajo.

Lo que si quiero retomar es éste rinconcito de mi vida que tantos meses he dejado abandonado. Espero tener la fuerza de voluntad necesaria para dedicarle un ratito, si no cada día, al menos dos o tres veces por semana.

Seguid atentas y como siempre....

Gracias por gastar un poquito de vuestro tiempo en pasaros por aquí.